LA CONSIGNA ES LA CONSIGNA. Una nueva reflexión acerca de la crisis de la formación jurídica.


 

Recientemente se conoció un informe de La Corporación Excelencia en la Justicia en el que se hace referencia a los graves problemas de formación de los abogados. Ello recuerda otros estudios como el presentado en el texto “Abogados sin reglas” del profesor Mauricio García Villegas y María Adelaida Ceballos Bedoya. Estos problemas y sus graves consecuencias nos permiten afirmar que somos los principales generadores de una violencia invisible.

Nada más doloroso que ver personas inocentes condenadas por la ausencia de una defensa técnica o por falta de compromiso del juzgador frente al deber de procurar un debido proceso; el aplazamiento de la vida digna de una persona que pierde su pensión por errores en la defensa; víctimas de falsos positivos a quienes se les niega la reparación por formalismos insustanciales; la indiferencia de los abogados frente a las más graves violaciones de los derechos fundamentales durante la pandemia o a los jueces negar una eficaz justicia por temor al prevaricato. Me confesaba uno de ellos: “A algunos les preocupa más quedar bien, que hacer las cosas bien”. Tanta impotencia frente a casos trágicos generados por errores en la formación, nos hace pensar en un emprendimiento: La morgue de la justicia. La ausencia de defensa técnica y el formalismo jurídico, son algunas de las verdaderas causas de la crisis de la administración de justicia.

La mercantilización del Derecho ha desdibujado uno de nuestros más importantes propósitos: la búsqueda de un equilibrio entre el bien común, el orden y la justicia. Sin duda, los problemas ocasionados por los mediocres procesos de formación ponen en evidencia el gran fracaso de las instituciones de educación superior y el nuestro, como docentes de derecho.

Esta crisis de la formación de abogados nos recuerda estas palabras:

 Buenos días. Por qué apagaste recién tu farol ?

- Es la consigna – respondió el farolero – Buenos días.

- Qué es la consigna ?

- Apagar mi farol. Buenas noches.

Y volvió a prenderlo.

- Pero por qué volviste a prenderlo ?

- Es la consigna – respondió el farolero.

- No comprendo – dijo el principito.

- No hay nada que comprender – dijo el farolero. – La consigna es la consigna. Buenos días.

Y apagó su farol.

A continuación se secó la frente con un pañuelo a cuadros rojos.

- Tengo un oficio terrible. Antes sí era razonable. Apagaba a la mañana y encendía a la noche. Tenía el resto del día para reposarme, y el resto de la noche para dormir...

- Y desde esa época, la consigna cambió ?

- La consigna no cambió – dijo el farolero. – Ésa es la desgracia ! El planeta fue girando de año en año cada vez más rápido, y la consigna no cambió !

 

Necesitamos una REV-EVOLUCIÓN, una actitud disruptiva, crítica y propositiva que permita hallar soluciones creativas e innovadoras ¿Una Asamblea Nacional Jurisprudente?

Estas son otras reflexiones elaboradas entorno a la crisis de la formación jurídica.

 

(http://estradavelez.blogspot.com/2017/02/colombia-pais-de-muchos-abogados-y-muy.html (Colombia, País de muchos abogados y pocos juristas)

http://estradavelez.blogspot.com/2016/01/ (crisis de la formación jurídica. El letargo de las facultades de derecho)

http://estradavelez.blogspot.com/2015/04/ (Crisis de la Justicia o Crisis social).

http://estradavelez.blogspot.com/2014/03/la-academia-en-la-que-creo.html (La academia en la que creo).

http://estradavelez.blogspot.com/2011/ Reflexiones acerca del Derecho y la Teoría del derecho que necesita Colombia.

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